¿El homo sapiens será más sapiens? Seremos más altos, más guapos, más fuertes, tendremos menos pelo o nuestros dedos serán más ágiles. Pero eso no nos hará mejores. Realmente, el único cambio que nos podría hacer evolucionar se producirá en el cerebro. Ese órgano indescifrable alberga secretos que no podemos entender.
 

     Derek Amato tras un golpe en la cabeza se convierte en un virtuoso del piano. No es de repente sepa tocar algunas canciones, no; ahora Derek es un gran concertista de renombre mundial. 

​

     Se me ocurren varias explicaciones: 

​

1. Explicación número uno: el golpe hace que partes inconexas del cerebro que aportan las habilidades necesarias para tocar música, en concreto el piano, de repente se unen: matemáticas, coordinación motora, lenguaje musical, ritmo,… Y todo ello de un golpe.

2. Explicación número dos: todos los seres humanos saben tocar el piano, pero no podemos hacerlo porque  no nos hemos dado un golpe en la cabeza que ordene bien los cables.

3. Explicación número tres: El conocimiento se transmite genéticamente y se hereda entre individuos quedando latente, registrado en nuestro ADN y tal vez, despertando tras la activación de ciertas fibras. Esto haría que solo algunos individuos tengan la capacidad oculta de tocar el piano, si algún ancestro lo supo alguna vez.

4. Explicación número cuatro: parece que Derek, durante su convalecencia vio desfilar notas blancas y negras entre alucinaciones, percibió cómo se ordenaban, cómo se codificaban en su cerebro. Tuvo acceso a esta información tras el golpe, no la heredó, no la llevaba dentro. De alguna manera conectó con la consciencia colectiva y aprendió a tocar el piano.

 

     La consciencia colectiva está ahí, disponible para que todos conectemos. Ya existen en nuestro organismo emisores y receptores que acceden a esa información aunque aún desconozcamos cómo funcionan. Esa habilidad se despierta con frecuencia. A veces vemos fantasmas, tenemos un deja vu o alucinaciones demasiado reales.
 

      Se llama telepatía; eso sí sería evolucionar. Poder conectarnos entre todos y compartir conocimientos. Pathos imagina cómo se abrirá esa puerta sobre la que se edificará una nueva civilización, una civilización que sí haga honor a su significado.